A partir de los 6 meses se puede empezar con la alimentación complementaria. La base fundamental de la dieta seguirá siendo la leche (en mi caso materna), pero ya pueden introducirse nuevos alimentos.
En nuestro caso empezamos con la papilla de cereales (sin gluten al principio), para almorzar, preparada con leche materna extraída. La verdad es que a mis dos hijos les ha costado bastante habituarse a la cuchara pero con paciencia (recordemos que no hay prisa, que la alimentación complementaria es eso, complementaria) todo llega. Tras la papilla de cereales introdujimos el puré de frutas para la merienda. En otra ocasión os hablaré de mi experiencia con la papilla de frutas, qué frutas utilizo, como las mezclo, etc.
Y después de estas dos papillas, llega el puré de verduras y pollo para comer. Nosotros con la pequeña lo hemos demorado bastante (casi a los 8 meses), ya que como todavía no se comía casi nada de las otras dos papillas, era tontería introducir una nueva.
Os cuento cómo la preparo yo. Los ingredientes cocinados aguantan hasta 48 horas en la nevera, por lo que cada vez lo puedes preparar para 3 tomas (la de ese mismo día que lo preparas y los dos siguientes). En esta ocasión lo voy a preparar para 4 días, así me puedo congelar una ración por si algún día la necesito.
Los ingredientes puedes variarlos. Según vayas viendo que le gusta a tu peque más o menos un sabor u otro. La zanahoria también es muy típica en este puré pero no se la pongas si tu hijo/a va estreñido (como es mi caso). Eso sí, inicialmente se deben evitar las espinacas, la col y la remolacha).
A partir de los 8 meses puedes introducir la ternera y el cordero. La preparación sería exactamente igual sustituyendo una carne por otra. Incluso puedes probar a mezclar ternera y pollo, que también les suele gustar mucho).
En nuestro caso empezamos con la papilla de cereales (sin gluten al principio), para almorzar, preparada con leche materna extraída. La verdad es que a mis dos hijos les ha costado bastante habituarse a la cuchara pero con paciencia (recordemos que no hay prisa, que la alimentación complementaria es eso, complementaria) todo llega. Tras la papilla de cereales introdujimos el puré de frutas para la merienda. En otra ocasión os hablaré de mi experiencia con la papilla de frutas, qué frutas utilizo, como las mezclo, etc.
Y después de estas dos papillas, llega el puré de verduras y pollo para comer. Nosotros con la pequeña lo hemos demorado bastante (casi a los 8 meses), ya que como todavía no se comía casi nada de las otras dos papillas, era tontería introducir una nueva.
Os cuento cómo la preparo yo. Los ingredientes cocinados aguantan hasta 48 horas en la nevera, por lo que cada vez lo puedes preparar para 3 tomas (la de ese mismo día que lo preparas y los dos siguientes). En esta ocasión lo voy a preparar para 4 días, así me puedo congelar una ración por si algún día la necesito.
3 jamoncitos de pollo sin piel (20-30gr
para cada ración)
Un trozo de calabacín como el que hay cortado.
Más o menos, un dedo por ración.
Cebolla, apio y puerro. Las cantidades las voy
variando, para que cambie el sabor del puré.
Un puñado de judía verde plana. Yo uso la
congelada de Mercadona porque tiene un
sabor muy suave.
Patata. Una patata pequeña por día o la
equivalencia en una patata grande.
Calabaza. Yo pongo un trozo de la que venden
Lo ponemos a hervir durante 20 minutos
en poca cantidad de agua sin sal.
Después lo metemos en un tupper y a la nevera.
Yo me guardo también un poquito de caldo para
añadírselo cuando lo voy a triturar.
Trituramos cada día la cantidad que vamos a usar
añadiendo 5 ml de aceite de oliva.
Y ¡listo!
A partir de los 8 meses puedes introducir la ternera y el cordero. La preparación sería exactamente igual sustituyendo una carne por otra. Incluso puedes probar a mezclar ternera y pollo, que también les suele gustar mucho).
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